El pasado 21 cambiamos de estación y además de tener unos días cada vez más largos, hemos podido disfrutar también de un poco de sol y temperaturas un ligeramente más altas.
En mi caso, este cambio se ha materializado en que he dejado a un lado las recien descubiertas raquetas de nieve y he disfrutado de nuevo de la bici de montaña. No es que sea una deportista notable ni mucho menos pero sí me gustan las actividades al aire libre y para ello este entorno es inmejorable.
Este deporte de nieve que recomiendo hoy es apto para todas las edades, asequible y con un grado de dificultad adaptado a cada uno porque depende del recorrido elegido y el tiempo e intensidad que se quiere invertir en la actividad.
Para hacer raquetas elegimos los alrededores de Venta Quemada (alto del puerto de Belate- Navarra).
Se podía llanear, subir unas pequeñas cimas, hacer una ruta circular... El día elegido salió inestable, con un intermitente xirimiri y un viento importante que traia consigo pesadas nubes negras. Pero incluso en estas circunstancias, adentrarse en el valle de la Ultzama es una buenísima opción. Hicimos una ruta fácil, pasando cerca de la Ermita de Belate y volviendo a nuestro lugar de partida en una vuelta un poquito más larga de la marcada. Por el camino nos cruzamos con algunos compañeros de deporte y con una pareja que practicaban esquí de fondo.
Ya de regreso, una breve parada en una de las Ventas que hay en la zona para hacernos con unos deliciosos canutillos, puso el broche final a esta salida.
Os recomiendo vivamente una visita al Valle de la Ultzama que nos ofrece muchas posibilidades más allá de las relacionadas con los hongos y setas.
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